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KATHERINE PINO, LA TECNÓLOGA MÉDICA Y ENTRENADORA DE HURACÁN FC

KATHERINE PINO, LA TECNÓLOGA MÉDICA Y ENTRENADORA DE HURACÁN FC

El fútbol hace mucho tiempo dejó de ser un deporte “solo de hombres”. De hecho, nunca fue algo exclusivo de ellos, y es que hay que entender que para los que vivimos y amamos este deporte, sabemos que el balompié es una actividad forjada en valores como el respeto, conciencia, inclusión, pluralidad, cultura, entre otros; rasgos que se aplican dentro de una cancha como en la vida en general, y es por ello, que la mujer debe estar sí o sí.

Nuestra Liga Internacional IFL, desde sus cimientos, ha buscado, aparte de promover el deporte y fútbol exactamente, hacerle un espacio a la familia, lugar en donde la mujer toma un rol único y esencial, que en muchas ocasiones la convierte en el núcleo de esta. Si bien, nuestra competición no cuenta con categorías femeninas, ellas si se han insertado a nuestro crecimiento, con las chicas que cumplen la labor de turno, juezas de línea, árbitras, y hace algunas temporadas, con una DT.

Katherine Pino, tecnóloga médica de profesión y trabajadora de un laboratorio veterinario, hace tres temporadas aproximadamente, cumple las labores de Directora Técnica del club Huracán FC, con una historia detrás que incluye fútbol, obviamente, pero también dedicación, respeto, aprendizaje e incluso, amor.

Su relación con el fútbol comenzó cuando su papá lo llevó al estadio Monumental a ver a Colo-Colo, pero por disturbios dentro del estadio, a ella le llegó un objeto contundente y nunca más fue. Sin embargo, con el pasar de los años, todo cambió: “No fui muy futbolera de chica, hasta que, con mi actual pareja, Iván Contreras, jugador de Huracán FC, nos conocimos en la Universidad, empezamos a pololear e íbamos al estadio. Ahí me gustó el fútbol, empecé a verlo, incluso jugué por un tiempo, no muy bien, pero algo se hacía”, nos señala Katherine, quien hoy se declara hincha de la “U”.

En base a esta relación de pareja es que justamente nació el lazo de Katherine con Huracán FC, iniciando un camino que hoy conduce con mucho trabajo: «Hace unos años terminamos con Iván, pero después nos reencontramos y por eso se dio que llegué al equipo, porque empecé ir a verlo jugar. Me empecé a llevar súper bien con los chiquillos y con esto de los terceros tiempos llegué a conocerlos bien, siempre hubo una relación de amistad tirando tallas y todo eso”, nos cuenta.

De esta forma, y con el pasar de los partidos, Katherine nos dice que empezó a tomar más protagonismo en las conversaciones de plantel, tácticas y formas de juego, logrando la atención de todos los jugadores: “Con el tiempo empecé a opinar, luego opiné demasiado y me empezaron a escuchar, y justo ellos tenían problemas de quién los dirigía, que de repente alguien no podía, se dirigían entre ellos, y eso no siempre acomodaba. Luego dijeron, ‘¿por qué no lo hace la Kathy?’, y así partí”, y añade: “Los chiquillos fueron súper respetuosos, me escuchaban todo lo que les decía, si tenían alguna sugerencia o no les parecía algo, siempre me lo dijeron con mucho respeto”.

Dado esto, se empezó a ganar el apodo de “La Bielsa”, mientras que su pololo, Iván, el “Bonini”; y aunque el sobrenombre suene como anécdota, para Katherine ha sido un enorme desafío y lo ha tomado como corresponde: «Empecé a ver tácticas y estrategias que de repente son difíciles de implementar porque no entrenamos como un equipo de fútbol lo hace todos los días. Veía a Marcelo Bielsa y a Jürgen Klopp, que son los que más me gusta, pero no siempre lo que se ve y estudia se puede aplicar en el equipo que tienes, porque hay jugadores con otras virtudes y desventajas en donde no todas las tácticas se puedan aplicar», nos explica.

Algo que resalta mucho en su relato, es el respeto que ha existido desde el primer momento, tanto de los jugadores hacia ella y viceversa: «Hubo una vez que estábamos súper bien, pero comenzamos a perder y enredarnos en la tabla, y nos desesperamos un poco, todos perdimos el control en cierto modo, pero siempre se mantuvo el respeto, me escuchaban y aportaban ideas. Siempre nos hemos llevado bien, muy pocas veces hemos tenidos roces, los cuales después se arreglan, aunque creo que son esos roces normales que debería tener un entrenador con sus jugadores cuando a alguien no le parece algo, es normal que pase, pero todo con respeto y bien conversado».

En lo táctico señala que no ha sido fácil proponer lo que quiere lograr dentro del campo de juego, pero sí aprendió a conocer muy bien las virtudes exactas de cada jugador: “Había algunos que jugaban en ciertas posiciones, pero que con el tiempo nos dimos cuenta que funcionaban en otros puestos; yo los conocí jugando en una forma, y ahora juegan en otra completamente distinta. Si bien ha sido un buen trabajo, ha sido largo para llegar al nivel que estamos, porque dentro de todo, no seremos el mejor equipo de la liga, pero jugamos bien, somos competitivos y en un momento Huracán no era así”, y además señala que se ha trabajado permanentemente en un punto que Katherine considera que es el mayor problema de Huracán, que es la falta de gol, algo que esta temporada ha ido mejorando gracias al planteamiento que alimenta a Jaime Ponce, su goleador y uno de los pichichis de la serie Premier, y esto se ha dado con la constante prueba en planteamientos hasta encontrar el indicado para el equipo.

Katherine está convencida que Huracán está para grandes cosas, por su juego y sus jugadores, todo en base a un trabajo evolutivo muy largo y bien hecho. Además, apunta a que al club solo le falta afirmarse en ciertas posiciones, y cuando eso se logre, el conjunto amarillo le podrá ganar a cualquiera, y a ella le gustaría estar presente cuando esto se dé: «Yo me veo hasta que alguien venga con mejores ideas y de pronto sea un mejor aporte al equipo. Lo hago por hobbie porque me gusta el fútbol y me gusta compartir con los chiquillos”.

Sobre su rol como mujer en la liga, ella es firme en señalar que el trato que recibe no es por su género, sino, porque se lo ganó al ser parte de un grupo que comparte valores como el respeto, y que, además, tiene la misma idea de disfrutar el domingo a domingo en Noviciado: «En la Liga ya hay árbitras, no veo por qué no pudiese haber una DT. Las mujeres cada vez nos empoderamos más en cosas que antes no se acostumbraban a hacer, pero no sé si se debe marcar una diferencia, es algo que vamos a ver día a día en hartos casos y nos vamos a acostumbrar a ello, lo veo súper natural. El respeto y amistad me lo gané antes de ser DT”, sostiene.

Finalmente, Katherine Pino hace hincapié en el grupo humano que se ha formado, destacando la historia de Víctor Sandoval y su superación tanto en la cancha como en la vida, para concluir recalcando el círculo que se formó, en donde ella está al centro guiando a sus muchachos en base al respeto, amistad y cariño. Ella sabe que todo esto se define en una palabra, y así lo siente: «Huracán para mí significa familia, porque siempre estamos en los buenos y malos momentos, nos peleamos, pero seguimos adelante porque vamos a mejorar y lo vamos a hacer, pero sino, no importa, viene el tercer tiempo y listo, se arreglaron los problemas», cierra la tecnóloga y entrenadora.

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